La pediculosis es producida por un parásito conocido comúnmente como piojo.

Existen tres variedades: la más común, Pediculus capitis, compromete solo a la cabeza. El piojo adulto es de color blanquecino que cambia de color a rojizo luego de succionar la sangre.

Características del piojo
No mide mas de 3 o 4 milímetros y tiene 3 pares de patas con ganchos que le permiten prenderse fuertemente a la piel.
La cabeza termina en una boca en forma de estilete que le permite penetrar la piel y succionar la sangre. Esta práctica la realiza cinco a seis veces por día. La mordida no produce dolor ni lastima, pero para poder extraer la sangre el piojo elimina con la saliva una sustancia anticoagulante que es muy irritante, de ahí el origen de la picazón y reacciones alérgicas.

La hembra vive 35 a 40 días y pone entre cinco y ocho huevos diarios. Llegan a colocar cerca de 200 huevos en todo su ciclo vital.
El huevo llamado liendre se adhiere al pelo por medio de una sustancia cementante hasta que después de ocho días hace eclosión para dejar salir al parásito, quien necesita otros ocho días para llegar al estado adulto.

Son de color amarillento y marrón oscuro cuando están por incubar y cambian al color blanco cuando están vacías, muchas veces se las confunde con descamación o caspa.
Fuera de su hábitat, y sin alimento el parásito vive tan solo entre 12 y 24 horas.
Cualquier persona con cabello puede contagiarse, aunque la mayor frecuencia se da en niños y niñas de cuatro a once años.

Síntomas
La picazón es el principal síntoma. El pequeño se queja que le pica la nuca o detrás de las orejas. Pero cuidado, ya que no siempre la molestia es tan localizada y puede extenderse a toda la cabeza.
El parásito al perforar la piel deposita en ella sustancias irritantes y alergénicas que son la causa de la intensa y continua picazón. El continuo rascado produce lesiones en el cuero cabelludo que pueden infectarse. En muchos casos, este suele ser el motivo de consulta con el pediatra, en otros casos se produce eccema del cuero cabelludo o una reacción alérgica en la nuca. Por supuesto que cuando se llega a estos extremos es que ha habido durante un largo tiempo visitantes en la cabeza del pequeño.
El cabello reseco y con pérdida de brillo debe alertar a los padres de la posibilidad de que el niño tenga piojos. También la anemia es frecuente en niños parasitados crónicamente.

Tratamiento
El principio fundamental para realizar un buen tratamiento es evaluar a todos los convivientes y tratarlos simultáneamente con el niño. El objetivo es: eliminar y erradicar las liendres y matar los piojos.
Existen múltiples productos farmacéuticos para realizar el tratamiento pero desgraciadamente, como han demostrado el grupo de investigación dirigido por el Dr. José Massimo, jefe del Servicio de Dermatología del Hospital de Niño Dr. Ricardo Gutiérrez, “la resistencia del parásito a estos productos es cada vez mayor”.
Por este motivo hay que consultar con el pediatra para que sea este quien aconseje qué utilizar y de que manera aplicarlo y así se alcanzara el objetivo buscado.
Se deberá evitar, por todos los medios, colocarle en la cabeza al niño cualquier medicamento en forma indiscriminada por mas que este avalado por una muy buena publicidad.
El pediatra recomendará insecticidas químicos, que actúan matando al piojo. Pero además es necesario pasar un peine fino metálico a contra pelo para erradicar las liendres.

Cómo prevenir y controlar

•No utilizar peines, cepillos, sombreros, de personas infectadas.
•No ponerse en contacto (cabeza a cabeza) con niños con piojos. Recordar que el parásito no vuela (no tienen alas) ni salta y por estos motivos es que el contagio se produce por contacto directo.
•Los utensilios que utiliza la persona infectada (peines, cepillos, etc.) cuarenta y ocho horas antes debe colocarse en sustancias insecticidas por 15 a 20 minutos o inmersos en agua caliente durante diez minutos.
•La ropa personal y de cama debe ser lavada con agua caliente o dejada en una bolsa cerrada herméticamente durante dos días.
•El tratamiento debe extenderse a todos los convivientes y contactos sean o no familiares.

La única forma de que esta epidemia sea desterrada es con la colaboración de los padres: Al detectar y tratar rápidamente cuando el niño esta infectado.
Al evitar que se ponga en contacto con niño con piojos hasta que estos estén curados.
La única forma de que no haya más visitantes en las cabezas de los niños es la responsabilidad de los padres.
fuente:
http://www.elpediatra.com.ar/pediculosis.htm

Consejos de para la prevención del contagio:

Los aceites esenciales funcionan como repelentes de insectos.

Para prevenir el contagio de piojos, realizar además del tratamiento básico con shampú de Tea Tree:

loción con 100 ml de Bálsamo ( swiss Just) para el cuerpo, 20 gotas de aceite esencial de tea tree y 20 gotas de aceite esencial de lavanda: vaporizar sobre el cabellos de los niños antes de ir a escuela.




Los aceites esenciales pueden ser grandes aliados en la lucha contra el acné. Usados en forma pura o diluidos con algún aceite base o vehicular, los aceites esenciales pueden ser aplicados en forma tópica para aliviar el acné suave a moderado.
A la hora de elegir un aceite esencial debes considerar tu tipo de piel, el tipo de acné que padeces, y si el aceite de tu elección debe ser diluido antes de ser usado.
Ver en este link

Algunos aceites esenciales no deben ser usados en su concentración pura, y es siempre importante seguir las indicaciones de la botella. Como regla general, mientras más sensible sea tu piel, más diluido deberá estar el aceite.
Cuando vayas a usar un aceite esencial sobre tu piel, también será importante elegir un aceite vehicular que no tapone tus poros. El aceite de semilla de uva es una excelente opción para la aplicación facial.
Tratamientos naturales para el acné: precauciones
El uso de aceites esenciales puede ser problemático durante el embarazo, incluso cuando sean aplicados sobre la piel.

En consecuencia, deberá consultarse a un experto en medicinas homeopáticas tanto para su uso prenatal como postnatal.
Por otra parte, los aceites esenciales pueden ser muy fuertes, y no deben ser considerados como alternativas “livianas” para al cuidado de la piel.

Como ocurre con cualquier tratamiento contra el acné, si se produce un brote o una irritación a causa de la aplicación, deberás discontinuar su uso en forma inmediata. Asimismo, deberías acudir a un doctor.


Aceite de árbol de té o Te Tree
El aceite de árbol de té es un poderoso antibacteriano y, en consecuencia, es excelente tanto para combatir el acné como para limpiar heridas en general.

Además, ayuda a aliviar irritaciones, urticarias y quemaduras, controla el acné y la caspa, y puede combatir las verrugas y otras infecciones fúngicas.

Las propiedades curativas de este aceite lo posicionan como uno de los mejores aceites esenciales para tener en tu gabinete de primeros auxilios.
En lo referente al tratamiento del acné, este aceite actúa en forma rápida y logra limpiar la piel al tiempo que calma el malestar en el área afectada.

Aceite de bergamota
El aceite de bergamota tiene una fragancia reanimadora y se combina armoniosamente con otros aceites, convirtiéndose en una excelente contribución para varios preparados de tratamientos antiacné.

La bergamota tiene propiedades antibacterianas y secantes, por lo que es un tratamiento localizado ideal para las manchas existentes. El aroma a cítrico tiene un efecto relajante sobre la mente y el alma.
Las frutas cítricas, bergamota, limón y la naranjas son reconocidas por su capacidad para restaurar el equilibrio oleoso de las pieles excesivamente secas o grasas y por su destacable acción desinfectante y purificante.
Ten en cuenta que este aceite no debe ser usado en su concentración pura a no ser que te lo haya indicado expresamente un profesional homeopático.
Modo de usos: Masajes, aplicación diluida, compresas.
Sugerencias de uso: En niños, usar la mitad de la proporción de aceite esencial recomendado. Cada vez que se utiliza un aceite x primera vez, se aconseja realizar una prueba de sensibilidad en la parte interna del brazo.
Para reconfortar pieles con acné, complementar el tratamiento básico de limpieza y tónico de te tree con compresas con 4-5 gotas de Aceite esencial de Bergamota . Realizar primero la limpieza, luego las compresas y por último el tónico.

Aceite de lavanda
El aceite de lavanda es bien conocido por sus propiedades antibacterianas y relajantes.
Es excelente para los tratamientos preventivos contra el acné, y es capaz de detener eficazmente brotes futuros mientras que limpia las manchas tan comunes en las pieles con tendencia al acné.
El aceite de lavanda es muy fuerte y debe ser diluido antes de aplicarse sobre la piel. No debe ser usado en su concentración máxima sin el consentimiento de un homeópata licenciado.